Sandra Vieira, nacida en Madeira y residente en tierras sudamericanas, mantuvo un sueño desde pequeña, pero com un propósito, crear moda.

Para hacer real este objetivo, en 2007 partió hacia el lejano continente australiano, para asistir a una de las 20 mejores escuelas del mundo: el Applied Fashion Design and Technology Institute TAFE NSW ubicado en Sydney, donde vivió durante varios años, los primeros como trabajadora/ estudiante.

Incluida en el enriquecimiento de su formación en el mundo de la moda como concepto y como industria, agregó todas las herramientas posibles, quería conocer y sentir la moda no solo como futura diseñadora, sino también como modelo paserelle.

En 2013, regresa a la Perla del Atlántico como diseñadora de moda, trayendo en su equipaje un torbellino de sensaciones: la satisfacción personal de un trabajo logrado , aprendizajes, vivencias vividas, inmensidad de planes, añoranza y consternación del alma afligida por la pérdida de su amado padre.

Ese mismo año presentó su primera colección en Funchal, pero apenas en 2015 surgió la marca homónima Sandra Vieira Couture.

Teniendo como público a la mujer cosmopolita, independiente, segura y empoderada, asume la originalidad del estilo, com un estilo casual / chic, con el refinamiento de la sensibilidad del hecho a mano.

Destaca por su cuidada selección de materiales, por su rigurosa aplicación de los estándares internacionales de la alta costura, y por su asimetría en líneas y cortes, siempre presente, que le confiere un tono irreverente y sensual.

Hasta el inicio de la Pandemia, el enfoque era afirmarse, darse a conocer, aceptar desafíos, participar en desfiles de moda internacionales, consolidar la marca con distribución en varios países.

Pero luego el mundo se detuvo, las agendas se cerraron y el mundo de la moda hibernó.

Ahora había tiempo, pero era necesario silenciar lo racional/mental, no era el momento de crear, sino de mirar hacia adentro.

“Los labios de la sabiduría están cerrados, excepto a los oídos del entendimiento”.

Hermes Trimegistus.

El recuerdo omnipresente del difunto padre, se convirtió en una inspiración que iluminó la incertidumbre. La diseñadora tenía en la figura paterna, un ejemplo de hombre fuerte, luchador, positivo, que incluso sucumbiendo a una enfermedad terminal, mantuvo hasta el final la ilusión, la esperanza y mucho amor por la vida. Padre dedicado, animaba a sus hijos a luchar por sus sueños y estaba orgulloso de su chica, la futura diseñadora, que estaba estudiando en el extranjero. Al borde del desafortunado resultado final, el padre hace una solicitud: “Antes de irme, me gustaría ver una línea tuya de camisas de hombre”. Aunque hasta entonces, en su encuadre, no había considerado esta alternativa, el largo encierro fue literalmente un hito, un punto de inflexión, que llevó a la creadora a cambiar de paradigma.

Surge una compulsión por el principio de la correspondencia, la ley de causa y efecto, no hay casualidades, sino causalidades, y lo que está afuera tiene que ser un reflejo de lo que está en tu alma. Como crisálida encerrada en un capullo dorado, de esta metamorfosis surge como una mariposa, la línea Camisas para hombre, exclusiva para ocasiones especiales: ¡todos los días! El cuidado en la selección de detalles y acabados, les otorga una elegancia única imbuida del entusiasmo y el amor por la vida, del difunto padre.

 Dentro de la maduración del proceso creativo de la línea de camisas para hombre, la diseñadora decodifica una nueva inspiración.

 Mantiene la esencia de la misma, pero rompe el concepto, el de dualidad.

 En su interpretación, dos naturalezas conviven simultáneamente, con el mismo significado. Camisas “pour faire pendant”, en consonancia masculinas e femeninas.

Alentada por el sueño de su padre, Sandra Vieira fundó la marca Virgílio Sousa, que empezó a fabricar camisas com etiqueta propia, made in Portugal.

Visión

Conclusión